Pedro Armario 01/01/2016
Resumen:
Existe una amplia evidencia que sugiere que la presión arterial (PA) central podría reflejar el estrés hemodinámico sobre los órganos diana de forma más exacta que la PA braquial. Se llevó a cabo una revisión sistemática, valorando la relación de la PA central en comparación con la braquial, con el daño preclínico de órganos diana. El metanálisis de los datos de estudios transversales mostró que la PA central en comparación con la PA braquial se asoció de forma más estrecha con (1) el índice de masa ventricular izquierda (12 estudios, n= 6.431; edad ponderada (DE), 49,9 (13,1) años; 51% hipertensos ; coeficientes de correlación global r=0,30; Intervalo de confianza (IC) 95% 0,23 a 0,37 frente a r=0,26; IC 95% 0,19-0,33; respectivamente; p<0,01 para la diferencia; (2) engrosamiento carotideo intima-media (7 estudios, n= 6.136; edad ponderada, 55,6 (13,2) años; 48% hipertensos): r=0,27; IC 95% 0,19-0,34 frente a r=0,23; IC 95% 0,16-0,30, respectivamente; p 0,01 para la diferencia. Cuatro estudios que valoraron la excreción urinaria de albúmina (n= 3.718; edad ponderada 56,4 (5) años; 69% hipertensos), reportaron correlaciones similares (p= no significativa) con la PA sistólica central (r= 0,22; IC 95% 0,14-0,29) y la braquial (r=0,22; IC 95% 0,12-0,32). Resultados similares fueron observados cuando se compararon la presión del pulso central y braquial en su relación con la afectación de órganos diana. El análisis de metaregresión no reveló ningún efecto significativo de la edad. En conclusión, la PA central en comparación con la PA braquial parece estar más fuertemente asociado con la mayoría de los índices de lesión de órganos diana investigados.
Comentario:
Es bien conocido que tanto la presión arterial sistólica como la presión del pulso (PP) son más elevadas cuando se miden a nivel braquial que cuando se mide la PA a nivel aórtico, debido a la amplificación de la PP a lo largo del árbol arterial. Desde un punto de vista fisiopatológico, el corazón y las grandes arterias estarían directamente expuestos a la PA central más que a la PA braquial, por lo que la medida de la PA central debería presentar mejor valor predictivo de lesión de órganos diana y de la aparición de complicaciones cardiovasculares que la PA braquial.
Diversos estudios han considerado que la PA central refleja el riesgo cardiovascular mejor que la PA braquial. Por un lado los estudios transversales han mostrado una asociación más estrecha entre la PA central y la afectación de órganos diana, en comparación con la PA braquial, y por otro lado, el análisis de estudios longitudinales ha mostrado que la PA central es útil en la predicción de episodios cardiovasculares. No obstante, los datos publicados no han sido siempre consistentes. Los autores de este trabajo han llevado a cabo una revisión sistemática y metanálisis, para valorar la relación de la PA central en comparación con la braquial, con la afectación preclínica de órganos diana. Se incluyeron los estudios realizados en adultos, tanto en población general, como en sujetos con riesgo cardiovascular o enfermedad, incluyendo hipertensos tratados y no tratados, o sujetos con obesidad, diabetes mellitus, nefropatía o trasplante renal. Como afectación de órganos diana se valoró el índice de masa ventricular izquierda (IMVI), el grosor intima-media carotideo (GIM), la velocidad de la onda del pulso (VOP) y la excreción urinaria de albúmina.
Las principales conclusiones del estudio son las siguientes: 1/ Hay una fuerte evidencia que sugiere una relación más estrecha de la PA central con el IMVI y con el GIM. 2/ La asociación de la PAS central en comparación con la braquial, fue más fuerte con todos los índices evaluados (aunque menor con la VOP) excepto con la excreción urinaria de albúmina, que mostró similares asociaciones con la PA central y la braquial.
Entre las limitaciones de este metanálisis estaría la heterogeneidad de los distintos estudios en la estimación de forma no invasiva de la PA central. La más utilizada ha sido la tonometría por aplanamiento radial (Sphygmocor), que aunque es una técnica validada, sería altamente sensible a los métodos de calibración. Recientemente se han publicado las recomendaciones de la American Heart Association para la mejora y estandarización de investigación vascular en rigidez arterial, que pueden complementar la información sobre este tema.(Townsend RR et al, Hypertension 2015;66:698-722).
Quedaría por evaluar en futuros estudios si la inclusión de la medida de la PA central mejora la estratificación del riesgo cardiovascular, y el conocer el valor de la medida no invasiva de la PA durante 24 horas en comparación con la MAPA convencional de PA braquial.
[su_note note_color=»#f4f2b8″ text_color=»#5e5e5e»]Cita original:
Kolias A, Lagou S, Zenioidi E, Boubouchairopoulou N, Stergiou GS. Association of central versus brachial blood pressure with target-organ damage. Systematic review and Meta-Analysis. Hypertension 2016;67:183-190[/su_note]